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miércoles, 28 de enero de 2015

Los simulacros de Konecta, una castaña




La prevención de Riesgos Laborales es una de las funciones que desarrollan los Delegados de Prevención, a menudo minusvalorada y menospreciada por la empresa, y que sin embargo repercute directamente sobre nuestra calidad de vida. Implica, entre otras funciones, la planificación previa de todo tipo de accidentes y contingencias, por este motivo la simulación de situaciones de emergencia, en especial de incendio, es inexcusable, elaborándose un calendario anual en las reuniones del Comité de Seguridad y Salud. Además Konecta BTO está obligada de informar a los Delegados de Prevención de los simulacros en los edificios de los clientes donde tenga trabajadores, algo que no se estaba cumpliendo hasta que CGT interpuso denuncia, y ha habido resolución favorable de inspección de trabajo.
La empresa siempre acusa a los Delegados de Prevención de falta sigilo, cuando son los propios coordinadores y supervisores quienes minutos antes de los simulacros se les ve ya danzando con los chalecos reflectantes en el respaldo de la silla, clara señal de que algo sucede. Habiendo centros en donde ya el día de antes, la empresa pone a prueba las alarmas, falseando los resultados posteriores del simulacro del día siguiente. Cuando, por otra parte, a menudo ni se informa a los Delegados de Prevención del día y la hora en que se van a realizar, dado que a juicio de la empresa, que alguien les observe y evalúe supone un estorbo.
La misión de los Delegados de Prevención en este tipo de simulacros es la medición de los tiempos, asegurarse que todos los trabajadores son evacuados, incluidos discapacitados, y las personas que hubiera en ascensores. El objetivo de las mediciones que hacen los Delegados de Prevención en los simulacros es tener un dato preciso del tiempo real de evacuación, pues de haber un incendio de verdad, de eso dependería salvar vidas, además si hubiera un incendio de verdad, el modo de producirse la evacuación no sería del modo ordenado en que nos hace creer la empresa, muy posiblemente habría avalanchas, aplastamientos, asfixias, siendo precisamente evitar muertes innecesarias la finalidad de este tipo de simulacros, aunque luego la empresa no se los tome en serio.
Hoy en día Konecta BTO no se encuentra preparada para este tipo de accidentes, por ejemplo, si se produjera un incendio de verdad en Alcobendas, donde todo el edificio se encuentra cubierto de moqueta, nos podemos imaginar la hoguera que se podría armar, y las pérdidas humanas que puede suponer, pero claro, se nos olvidaba, la empresa nos pone unos extintores de chiste, sólo para justificarse ante inspección del trabajo, para que no le metan una buena multa, importándoles bien poco la vida y salud de sus propios trabajadores.

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